Las pasadas navidades, Teruel Existe envió un detalle navideño a destacados parlamentarios, tal y como otros grupos tienen por costumbre realizar llegados a estas fechas.
Desde Teruel Existe eligieron un producto turolense, el azafrán del Jiloca, para dar a conocer la excelencia de la producción agroalimentaria de nuestro territorio y en concreto, la gran calidad de este producto. El presidente del Gobierno y los ministros y ministras, el presidente de la oposición y algunos diputados y senadores, recibieron la felicitación navideña de Teruel Existe junto con un delicado envase de dos gramos del apreciado azafrán del Jiloca, una “excelente muestra de la riqueza de nuestro territorio”.
El detalle, producido y comercializado en la Comarca del Jiloca, se caracterizó también por su acertada y cuidada presentación, en la línea de la excelencia de este producto, que está considerado uno de los mejores del mundo. Se entregó acompañado de un folleto explicativo acerca de su cultivo tradicional en el Valle del Jiloca, de su recolección manual en las gélidas madrugadas y de la delicada tarea del esbrizne de la rosa para extraer las hebras rojizas que aportarán su característico sabor como condimento culinario. También destacaba el gran potencial de Teruel para su producción, por las características idóneas que presenta una parte de la provincia en cuanto a altitud y por el clima frío que caracteriza el largo invierno turolense, así como la gran calidad de este cultivo, reconocido nacional e internacionalmente.
La calidad del azafrán turolense y su cuidada presentación fue muy apreciada a tenor de las respuestas de muchos de los parlamentarios que lo recibieron, entre ellos la Ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, que quiso agradecer personalmente la recepción de lo que definió como toda una “joya”.
Cabe recordar que en la zona del Jiloca, tiempo atrás, el cultivo del azafrán fue uno de los sustentos de la economía familiar en la práctica totalidad de los hogares. Sin embargo, su cultivo se fue abandonando con el paso del tiempo, hasta el momento actual, en el que emprendedores turolenses, convencidos del gran potencial de su calidad, recuperan y comercializan el producto en el mercado agroalimentario internacional.