El senador Joaquín Egea intervino el jueves en la comisión de las comunidades autónomas mostrando su preocupación por los desequilibrios en las provincias de la España Vaciada, responsabilizando de su abandono también a los gobiernos autonómicos. Denunció la fragilidad de los servicios sanitarios de la provincia de Teruel, por los que puede sufrir el mismo drama que Soria y Segovia, y las dificultades extremas que van a sufrir para salir de la crisis al sumarse el cierre de la central térmica de Andorra.
La comisión general de las comunidades autónomas, reunida en el Senado, ha contado con la asistencia de la ministra de Política Territorial, Carolina Darias, representantes de quince gobiernos autonómicos, y por los grupos parlamentarios asistieron veinte senadores miembros de la comisión.
Joaquín Egea ha señalado que el problema demográfico de Teruel presenta indicadores muy graves y que las proyecciones del INE, para la población de la provincia en 2030, son todavía más preocupantes: una reducción del 8% en la población y una pirámide poblacional totalmente invertida. Resaltó que “si en Teruel no actuamos pronto tendremos un difícil futuro”.
Egea ha recordado que los problemas de Teruel no son una excepción en este país, “se comprenden mejor si observamos la realidad del medio rural, lo que llamamos España Vaciada, que comprende veinticinco provincias en ocho comunidades autónomas, una realidad social que tiene un rango de problema estatal cuya importancia y complejidad exige la acción coordinada del Gobierno y de las comunidades autónomas”.
Sanidad diezmada en la provincia de Teruel
Ha mostrado su preocupación por las importantes carencias del sistema sanitario en estas provincias, recordando la dramática situación que han vivido Soria y Segovia, y destacando que lo mismo puede pasar en Teruel si hay una segunda ola de contagios, “porque tenemos un sistema sanitario diezmado, con solo dos hospitales, el más viejo de España en Teruel y un hospital de Alcañiz sin Ucis”. En estas semanas en las que la capacidad de las UCIs es determinante el senador ha informado sobre el desequilibrio del sistema sanitario en Aragón informando que la ratio de camas UCI en Zaragoza es mucho más del doble que Teruel, y que ni siquiera hacen PCR en los laboratorios de su provincia. Cabe recordar que en la provincia de Teruel, la dotación en periodo ordinario es de seis camas de UCI, una por cada 22.166 habitantes, mientras que en Zaragoza el conjunto de los hospitales públicos y privados disponen de ciento cincuenta camas de UCI, lo que representa una ratio de una por cada 6.360 habitantes.
El senador de Teruel Existe ha puesto en relieve que “en un país más equilibrado y mejor vertebrado se afronta mejor este tipo de pandemias, y en ocasiones las propias comunidades autónomas con sus políticas lo provocan”, poniendo como peor ejemplo los contrastes demográficos en Aragón donde más de la mitad de los habitantes viven en la ciudad de Zaragoza.
Un desescalado diferenciado para el medio rural
También ha recordado la necesidad de un trato diferencial en las medidas de confinamiento para las zonas con reducido tamaño demográfico y menor densidad de población, manteniendo la posición sobre esta cuestión que Teruel Existe ha defendido en el Congreso desde hace semanas. “Es absurdo e injusto pensar que pueblos de menos de 1000 habitantes tienen que tener las mismas normas que el resto del país, e incluso es injusto también que en Aragón se pretenda que la salida de la crisis en las pequeñas ciudades de Teruel y en Huesca, vaya a la misma velocidad que en Zaragoza”.
La crisis económica en Teruel será más grave por Andorra
En el ámbito económico, el senador ha expresado su preocupación por el impacto de la crisis post-COVID indicando que a las cifras de la importante crisis que prevé el Banco de España, una reducción del 13,6% del PIB, en la provincia de Teruel sufrirán un 10% adicional por el cierre de la central térmica de Andorra. “Señorías esto es dramático para mí provincia, aún no se ha firmado un convenio de transición justa, y afecta a una gran parte de la provincia, la gente ha empezado ya a marchar ante la falta de expectativas”.
Egea considera que la transición justa debe cambiar el sistema productivo actual basado en la transformación minero-eléctrica, resaltando que “no queremos una transición justa que implique sólo llenar el territorio de paneles solares y de molinos, poniendo en riesgo además la viabilidad del desarrollo económico de algunas comarcas por las afecciones al paisaje”. Ha pedido a las diferentes administraciones que adopten medidas urgentes para impulsar el desarrollo económico en toda la provincia con proyectos a largo plazo que sean auténticos motores desarrollo.